¿¡Y que hacer con los berrinches?!

Esta semana quisiera compartirles algunos conceptos y tips sobre las “temibles” pataletas y los berrinches. La verdad es un tema que como padres nos confronta bastante, y muchas veces no sabemos qué es lo que realmente sucede, ni cómo hacerles frente.   ¿Qué Hacer cuando mi hijo/hija tiene una pataleta o berrinche?   Primero hay que entender que son comportamientos que forman parte del desarrollo emocional de los niños/niñas. Como padres son un reto, y son una de las situaciones más evidentes para poder aprender a poner límites y fomentar un adecuado manejo de las emociones.   Generalmente estos comportamientos se dan cuando los pequeños quieren expresar su frustración ante un hecho o situación que no comparten o que no entienden bien. En ambos casos, el niño/niña nos está mostrando su intención de diferenciarse y autoafirmarse frente a papá y mamá.   Es importante saber diferenciarlos para poder dar la contención y orientación adecuada.   Diferencia entre pataleta y berrinche:   ¿Qué es una pataleta?   Es una manifestación exagerada y violenta de enfado y ataque de nervios, en el que el niño/niña pierde el control de sus emociones, y no sabe bien que es lo que le pasa. La parte inferior del cerebro, es la que trabaja en dicho estado, no hay procesamiento de información. Frente a esta situación no se puede dialogar ni pretender que cambie inmediatamente. Ofrecer entendimiento, contención y afecto será lo más importante para que se pase cuanto antes.   ¿Qué es un berrinche?   Es un disgusto o enfado con gritos y llantos, en el que el niño/niña controla sus emociones y tiene claridad de lo que quiere. La parte superior del cerebro es la que trabaja en este estado, y se puede procesar información. Frente a esta situación se deben establecer límites concretos al instante, ofrecer una conversación clara y concisa cuando pase la escena y haya calma.   Consejos o tips para manejar dichas manifestaciones emocionales:  
  • Nunca pierdas el control frente a la situación, por embarazosa o incómoda que sea para ti. (Tanto él/ella como tú no quieren estar en esta situación)
  • Ponte a su nivel, sostenle la mirada y utiliza palabras simples y concretas para que busque la calma, usando un tono de voz suave y tranquilo. (A veces quieres gritar igual, o desesperarte… tómate un minuto, respira y retoma, tu eres su ejemplo).
  • Ofrecer otra alternativa, en caso de berrinche. Si es pataleta déjalo que termine su escena y contenlo con un abrazo.
  • Evita explicaciones largas, pon tus límites siendo:
Claro: ejemplos que entiendan, tangibles para ellos. Concreto: asertivo en tus palabras. Corto: explica por qué, no entrar en detalles, ni comparaciones. Cumplido: lo que dices y te comprometes a partir de lo sucedido, cúmplelo. Consistente: no reprender, ni castigar con consecuencias o cosas que no tienen que ver con lo sucedido (ej: por hacer este berrinche, no comes helado hoy).   Referencias: Conferencia Límites y Consecuencias, Las 5 “C” de intervención con Limites, (Vidal Schmidt) y Psicología del desarrollo Hoy, (Hoffman, Paris, Hall).